En un año que se perfilaba competitivo y difícil en el eterno
enfrentamiento MCU-DCCU, a medida que va cerrándose el año ya sabemos quién se
lleva el premio, y aunque hayan los detractores, Marvel lo hizo de nuevo.
Si con Captain America: Civil War, se generó la fractura de
Los Avengers, (y desde la FOX: Deadpool nos demostró que le importa un c….. la
vida, y Apocalypse tuvo un encontronazo con Dark Phoenix) con Doctor
Strange las cosas se
ponen, a falta de una mejor palabra, más extrañas que nunca.
Si con las
películas anteriores Marvel había explorado conceptos de extraterrestres, limitaciones
gubernamentales, experimentos científicos, este nuevo filme, dirigido por Scott
Derrickson (especializado en el cine de horror mayormente), busca presentarnos un
mundo más místico, en donde la magia y la manipulación de la realidad son cosa
de todos los días.
(Como
se conecta este mundo psicodélico al mundo de Los Avengers? Es el gran dilema
que los hermanos Russo deberán resolver para Avengers: Infinity War…y esto será
lindo de ver…)
El mismísimo
Sherlock Holmes, Benedict
Cumberbatch se viste la Capa de Levitación e interpreta al
doctor Stephen Strange, adornándole con la arrogancia e inteligencia que
resaltan en los personajes que suele interpretar, ayudado por una
caracterización que es uno de los
mejores traspasos del comic a la realidad. (meses atrás, en plena producción se
había confirmado que el personaje llevaría su traje como del comic – con capa y
todo - y esto pudo haber sido riesgoso a
la hora de la ejecución)
Lo
secundan un cast impecable: Rachel McAdams, como la colega Christine Palmer (a
quien le faltó tiempo y momentos para brillar), Tilda Swinton, con la Ancestral
(que casi se roba el espacio de Strange con su tranquila y correcta
interpretación), Chiwetel Ejiofor, como el Baron Mordo (y posible futuro
villano), y Mads Mikkelsen, como Kaecilius. Nota especial para Benedict Wong, como Wong (el badass bibliotecario guardián)
El
argumento es la típica plantilla de una película de origen, marca Marvel: el
personaje principal, rico, egoísta y arrogante, se topa en una situación –
pérdida total del uso de sus manos en un accidente automovilístico - que le llevan a repensar su estilo de vida,
solo que en lugar de hacerlo en una cueva (como Tony Stark), lo hace en Nepal y
aprende ciertos secretos místicos que para él “no tendrían sentido” si tuviera
que seguir en su zona de confort. Con entrenamiento, estudio y prácticas, se va
demostrando que el neurocirujano tiene habilidades escondidas para las artes místicas,
sumadas a su natural curiosidad que lo llevan incluso a lidiar con secretos y
elementos prohibidos.
El
aspecto más alto de esta película, es
el visual. Tiene la familiaridad de Inception y sus pliegos de
realidad, pero ahondando un poco más (diríase que la lucha de Joseph Gordon-Levitt
en el pasillo giratorio, tiene su contraparte en el ataque al Sanctum de Nueva
York), llevando al espectador en un viaje multidimensional y caleidoscópico que
raya lo alucinógeno. Y no es algo malo, ya que es el núcleo mismo del
misticismo de Doctor Strange. Solo mirar las alocadas imágenes del comic original
para entenderlo.
Otro
punto alto es la identidad musical que le otorga el score desarrollado por
Michael Giacchino, que si bien tiene toques de StarTrek por ser el mismo
compositor, ese riesgo de tomarse el acid trip musical y mezclar cuerdas
orientales, influencias de Pink Floyd y elementos barrocos, digamos que suman muchísimo (ej: Go for Baroque). Esto es un
ejemplo claro de que no estamos frente una película de superhéroes cualquiera.
El villano, no es el más destacado.
Kaecilius fundamenta sus acciones como una suerte de rebelión contra sus maestros
y reclama el conocimiento del uso de otras dimensiones (según lo prometido por
otro villano mayor) pero no se llega a ahondar en sus convicciones, eso si… es
el personaje que detona alguna de las escenas de enfrentamientos más increíbles
de la película. (Spoiler: Tomar nota de que esta tibieza no sucede con Mordo, al final del
film ya sabemos cual es su orientación y aprendimos a lo largo de su soporte a
Strange, que su pensamiento demasiado recto, lo llevan a cambiar de bando y
seguro sabremos mas de él mas adelante)
Doctor
Strange es una película que logra hacer algo especial y único en lo visual,
mejora lo que ya conocemos de Guardians of the Galaxy (la escena con el Orbe) y
en Ant-Man (la dimensión subatómica). En lo narrativo hay similitudes con otras
películas que hemos visto en los últimos años, pero por primera vez se explora
el Multiverso, o esas dimensiones paralelas que existen en el mundo de Los
Avengers pero que están fuera de su capacidad, por más poderosos que sean. El
enfrentamiento final demuestra que Doctor Strange ha escalado alto en
conocimiento y su entrenamiento científico se complementa con su entrenamiento místico
al que se suma la convicción de que su vida ya no es la misma de cuando era el
arrogante neurocirujano: la imagen de su solitaria silueta recortada
contra el Sello de Vishanti (elemento clásico del comic) en el Sanctum de Nueva York, su nuevo hogar, y aferrándose al recuerdo del "tiempo" (reloj) pasado de su vida anterior, es la prueba de ello.
Doctor
Strange will return, dice al final de los créditos (después de dos
espectaculares escenas post-creditos, y un recordatorio de que se debe manejar
con cuidado) y contamos con ello.!!!
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