Si hay un título que en los últimos días se ha convertido en el hazmerreír en el mundo, ese es el de Los 4 Fantásticos, uno de los equipos de supers más antiguos de Marvel, y que por una de esas cosas de la vida no llega nunca a repuntar más allá del resultado de pasable a mediocre, en términos cinematográficos.
Ese label se le pegó en la frente a Los 4 Fantásticos del 2015, una producción que cuenta con un equipo prometedor de jóvenes estrellas,una idea argumental inicialmente sólida (la línea de los Ultimates FantasticFour de inicios del 2000, un reboot del comic donde no solo modifican la edad de la familia, sino que también se modifican los orígenes de sus poderes) y una oportunidad brillante de resarcir los errores de las anteriores.
El resultado: una guerra mediática entre el director (el novato Josh Trank) y el estudio (FOX). Los artículos negativos sobre las historias de la producción hablan de las juergas e irresponsabilidades de Trank, un casi intercambio de golpes con el de por si egocéntrico Miles Teller(Reed Richards) y una intervención del estudio recortando presupuesto,reescribiendo guiones, cambiando el personal y editando el material final llevando a Trank al borde de la histeria (según un tweet la versión final estrenada no fue su versión). O sea, si nos ponemos a sumar dos mas dos, si las cosas fueron asi desde el comienzo, el resultado está a la vista: una película vacía, demasiado plana, personajes desaprovechados (Hello Sue!) y sin cameo de Stan Lee!!! en la que un par de ojos medianamente amaestrados con algo de cine puede notar los errores de edición y la diferencia de tono entre las partes.
(desde aqui spoilers)
Pero no todo es tristeza para los cuatro amigos, porque hay elementos que rescato y que quiero destacar: al ser una película de orígenes,la importancia de ver la evolución de como este grupo de superhéroes aprende a manejar sus dones siempre es interesante (a mi me gustan mucho los orígenes), y en este caso, los jóvenes lo aprendieron en carne viva, literalmente, y no fue que se recuperaron en un hospital de Aspen como la versión del 2004, sino que fueron sometidos a confinamiento y manipulación del gobierno como ratones de laboratorio.
En pantalla, no es necesariamente un momento divertido ver a Johnny en llamas, como un cuerpo calcinado tirado en un rincón, mientras Reed trata de ayudar a esa mole de piedras que pide ayuda, antes de notarse a si mismo deforme, sangrante y estirado. (se ven vistazos del talento de Miles Teller en estos momentos, en los que le rebajó el aburrimiento). Esta escena en particular es un hito a tener en cuenta.
En ningún punto vemos los icónicos trajes azules, sino que vemos que cada uno de ellos lleva un traje especial adecuado a sus poderes o necesidades. El más peculiar es el de Reed, bien “casero” con cables y resortes que evocan la función de extenderse como la hace su cuerpo. Creo que es un gran item, que apela al “realismo” pretendido. Destacamos que La Mole, simplemente no usa traje, asi que su gran trasero está al aire todo el tiempo. (jajaja)
Por otro lado el pobre Víctor Von Doom. Una vez más, al brillante científico egocéntrico se lo presenta sazonado con un amorío fallido que al final tampoco fue bien elaborado. Visualmente, es pobre (en ese sentido, punto para la versión anterior que si se parecía mucho al comic) y no es para nada amenazador como debió ser pero tiene un par de momentos en los que utiliza su nuevo poder adquirido (como un pulso) con bastante efectividad. Tiene un par de líneas muy interesantes (antes del accidente) que hacen referencia a como los verdaderos ejecutores de los grandes adelantos de la humanidad (concretamente hablando del alunizaje) son los que nunca son mencionados y acaban olvidados o en la pobreza, cosa que no deja de tener razón.
En general Fantastic Four es como un electrocardiograma, donde a ciertos picos le contraponen muchos bajos, pero es pasable de ver. Nunca vamos a conocer los pormenores de la producción, (quizá en algunos años a alguien se le ocurra hacer un documental llamado “La maldición de los Cuatro Fantásticos” y puede que sepamos más detalles de ésta y las anteriores y el porqué de sus fracasos) pero la realidad es que mucho tiene que ver el efecto dominó de los reviews negativos, y eso fue el beso de la muerte para Fantastic Four.
Los fans en las redes lloran porque los derechos retornen a Marvel – como pasó con Spider-Man - para que se tomen cartas en el asunto, pero personalmente ya no creo que sea el momento: la saturación del género de superhéroes está llegando a su pico máximo,y no estoy segura de que la Primera Familia de Marvel, aguante otro fiasco. Dejen por favor a Reed, Sue, Johnny y Ben en paz.
Mi puntuación: 5.5/10
NOTA: un premio al editor del trailer que hizo un trabajo...fantástico. XD